La pandemia surgió en un momento en que las activistas feministas de todo el mundo se estaban preparando para celebrar el vigésimo quinto aniversario de la Plataforma de Acción de Beijing de 1995 y para dar un nuevo impulso a fin de hacer realidad sus compromisos progresistas. Aunque las últimas dos décadas y media han traído un avance significativo en la participación política de las mujeres, el ritmo general de cambio ha sido lento y desigual. En muchos lugares, el progreso hacia la igualdad de género en la vida pública se ha estancado en los últimos años, amenazado por actores antiliberales y autoritarios que buscan hacer retroceder los logros del pasado.
De acuerdo con entrevistas realizadas con defensoras de los derechos de las mujeres, expertas electorales y mujeres políticas en diez países y cinco regiones, este artículo describe cuatro riesgos emergentes que plantea la pandemia para la participación política de las mujeres, y cuatro oportunidades que surgen en este momento de crisis, a los ojos de las mujeres políticas y defensoras. Nos centramos principalmente en las implicaciones para la participación electoral de las mujeres como votantes y candidatas, dado que las elecciones son procesos fundamentales para garantizar la responsabilidad democrática y la representación de las mujeres en las instituciones políticas formales. Este análisis es preliminar; pueden surgir más obstáculos y oportunidades a medida que se desarrolle la crisis y se cuente con mejores datos.