El calendario electoral que regirá este año y el proyecto de ley de convocatoria a los comicios generales fueron los dos puntos de debate en la reunión de sala plena del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que se celebró ayer en La Paz. La jornada también movilizó a la oposición que, a través de algunos candidatos, denunció un supuesto fraude, mientras que representantes del Frente Para la Victoria (FPV) presentaron un recurso ante el Tribunal Constitucional en Sucre para revertir la fecha de las elecciones, convocadas para el 20 de octubre.
“Está en el temario (el calendario y el proyecto de ley), depende de lo que decida sala plena”, dijo la presidenta del TSE, María Eugenia Choque, a radio Compañera antes de ingresar a la reunión. Luego todos los vocales apagaron sus celulares y no respondieron a las llamadas durante la jornada.
Los políticos aprovecharon para censurar la acción de los vocales. El candidato a vicepresidente por Bolivia Dice No, Edwin Rodríguez, dijo que el TSE prepara un fraude para beneficiar al MAS. Afirmó que realizarán todos los esfuerzos para hacer campaña en otros países donde votarán los bolivianos.
Otro candidato, Israel Rodríguez, FPV, acudió al Tribunal Constitucional para presentar una Acción de Cumplimiento, para obligar al TSE que cumpla con el calendario electoral que rigió las primarias en enero de este año, con lo que las generales se celebrarían el 27 de octubre, dijo el abogado Frank Campero.
Las fechas
El diputado Wilson Santamaría (UD) afirmó que el TSE tiene tiempo para organizar todo el proceso, pero los vocales tendrán que presentar el anteproyecto de ley de convocatoria a elecciones máximo hasta fin de mes. “Puedo asegurar que el documento tendrá disposiciones transitorias que arreglarán o maquillarán las fechas que se indicaba en la Ley de Organizaciones Políticas”.
En respuesta, el diputado Remberto Calani (MAS) dijo que de acuerdo con los plazos que menciona la ley, la elección debía realizarse el 23 de octubre de este año, pero la misma norma señala que los comicios deben realizarse un día no hábil y, en ese caso, se puede tomar una semana antes o una semana después de ese plazo.
La presidenta de la Cámara de Senadores, Adriana Salvatierra (MAS), recordó a los senadores opositores y binomio de la alianza Bolivia Dice No, Óscar Ortiz y Edwin Rodríguez, manifestaron su conformidad por celebrar las elecciones una semana antes o una semana después del 27 de octubre, por lo tanto, restó crédito a sus críticas.
Por su lado, la presidenta del TSE, María Eugenia Choque, explicó que los comicios no se podían realizar después del 27 de octubre porque sería el 3 de noviembre. En esa fecha se celebra Todos Santos, y al ser jornadas electorales se debía declarar silencio electoral que implica la aplicación de auto de buen gobierno, razón por la cual se descartó esa fecha.
Tampoco podía ser el 27 de octubre porque coincide con la elección en Argentina y el TSE no podría utilizar varios de los recintos electorales en ese país.
No hubo pedido
El senador oficialista Efraín Chambi dijo que enviaron la petición de los migrantes bolivianos en Argentina para que se difiera las elecciones. Supuestamente ese pedido fue remitido al TSE y por eso los vocales querían modificar la fecha.
Pero la presidenta del TSE aseguró que nunca recibió un pedido formal y que los vocales electorales de todo el país asumieron la decisión por los problemas logísticos que se desatarían en Argentina y por las fechas festivas en Bolivia.
La vicecanciller Carmen Almendras afirmó que la fecha que fijó el ente electoral fortalece el derecho al voto de los residentes bolivianos en el exterior, en particular de los connacionales que viven en Argentina.
“El Órgano Electoral es autónomo en las decisiones que toma. Hemos recogido la solicitud de colectivos (...) y lo que se quiere, para dar salud al sistema democrático que está vigente; deseamos que haya una amplia participación, que todos los bolivianos, todas las bolivianas (...) ejerzan este derecho ciudadano con las más amplias libertades para tomar las decisiones de nuestro país”.
Argentina y el 10%
De acuerdo con la versión de los opositores, el MAS está empecinado en el voto de los bolivianos en el exterior, principalmente Argentina, porque es el único modo de garantizar el porcentaje de la brecha porcentual entre el primero y segundo candidato.
El opositor Wilson Santamaría recordó que en la última elección el MAS logró más del 80% de la votación en ese país y aunque los votos no significan escaños parlamentarios, juega en el porcentaje entre el primero y segundo colocado. Según la Ley de Régimen Electoral, si hay una diferencia mayor al 10% entre el primero y el segundo candidato a la Presidencia se proclamará ganador al primero; caso contrario se irá a segunda vuelta y los opositores aseguran que el MAS tiene pavor en llegar al balotaje.
María Eugenia Choque dijo que el TSE trabaja en el empadronamiento en cuatro países y que se definirá si este año participan las 33 naciones donde Bolivia tiene consulados, tal como sucedió en las elecciones de 2014.
Pero el Órgano Electoral también trabaja en el empadronamiento masivo en el país y para eso tienen que definir el Calendario Electoral.
El FRI y su demanda
Asimismo, se conoció que la sala plena tenía en agenda la demanda del vicepresidente del FRI, Víctor Hugo Landívar, que demandó la nulidad de la alianza de su partido con el candidato Carlos Mesa.
Ayer, el representante del FRI ante el TSE, Walter Villagra, explicó que su correligionario demandó una alianza inexistente y lo presentó ante el Tribunal Electoral Departamental (TED) de Santa Cruz.