En el Congreso sigue en etapa de elaboración el proyecto de ley para la creación del estatuto de la oposición, que será la hoja de ruta para que la guerrilla aterrice en la política colombiana.
Aunque no hay de momento un documento oficial, son varias las medidas que ya se empiezan a dilucidar frente a esos mecanismos que apuntan a garantizar la presencia de los futuros desmovilizados en la arena electoral en el período de posconflicto. La financiación de los partidos y el acceso a los espacios en los medios de comunicación son sólo algunas de las primeras herramientas con las que las Farc podrían contar.
Otra idea es la creación de una circunscripción especial para las minorías, donde se garantice que el 20 % que tienen de representación actual en el Senado y la Cámara siga en el futuro.
De cualquier manera, el mensaje es claro: los partidos pequeños piden que el estatuto de la oposición no sólo les dé garantías a las Farc sino que los tenga en cuenta para continuar en el ejercicio de la política con posibilidades a largo plazo.